La chispa que encendió el fuego de mi pasión por la decoración con globos comenzó con la desesperación del COVID, en ese momento me quedé sin trabajo y empecé a pensar que solución dar para tener un ingreso, al principio lo veía como hobby pero luego me enamoré de lo que era capaz de transmitir mediante globos.

Hice mi primer curso y hasta yo me quedé sorprendida del mundo tan maravilloso que es, tuve mi primer pedido de un familiar y me di cuenta de la oportunidad de crear alegría y transformar espacios ordinarios en experiencias extraordinarias. La idea de llevar sonrisas a los rostros de las personas a través de mi arte me impulsó a dar el paso valiente de crear mi propia empresa.
En cada desafío, encontré una oportunidad para crecer y aprender, y en cada logro, confirmé mi creencia en el poder de la creatividad para hacer del mundo un lugar más luminoso.
Hoy, mi empresa de decoración con globos es más que un negocio; es mi forma de compartir mi pasión con el mundo y dejar una huella de alegría y belleza en cada evento que tocamos.
Que mi viaje inspire a otros a seguir sus sueños con valentía y determinación, porque en cada globo, hay un mundo de posibilidades esperando ser descubierto.